jueves, 9 de agosto de 2012

“¡Qué manía de tragarse mis llaves se han cogido las putas!” Jack el destripador




Para quien no lo sepa ya (para saberlo no hace falta ni leer, con que vayas al cine sobra), Jack el Destripador (Jack the Ripper en inglés) es el más conocido de los seudónimos que se le dieron a un asesino en serie  no identificado que básicamente se dedicó a matar prostitutas en 1888, principalmente en el distrito de Whitechapel y las zonas pobres de los alrededores , en Londres.

Una noche en la que cometió uno de estos crímenes y ya mientras procedían al levantamiento de lo que quedaba del cadáver, uno de los policías presentes oyó como le susurraban ésta frase, a lo que el policía contestó: “Ya ves, es que no tienen rememedio.”


viernes, 3 de agosto de 2012

“!Uy qué torpe! ¡Se me ha caído el cuchillo!” Guzmán el Bueno




Alfonso Pérez de Guzmán fue un militar  y noble leonés que pasó a ser parte de la leyenda Española por la defensa de Tarifa, que le encargara el rey Sancho IV. Amenazada por el infante Don Juan que en 1294 inició el sitio.

Al ver éste que no podía tomarla ni tentando a Don Alonso, ni por la fuerza,  recurrió a presentar ante la muralla a Pedro Alonso, hijo de Guzmán, maniatado y amenazar con degollarlo allí mismo si no rendía la ciudad. En este momento y antes que rendir Tarifa,  cuenta la leyenda que Guzmán el bueno prefirió arrojar su daga para que con ella, si era preciso, acabara con la vida de su hijo (cosa que así hizo el infante, degollando, decapitando y catapultando la cabeza de Pedro a la ciudad). Tarifa no pudo ser tomada.

Pero la verdad tras esta historia es otra: 
“(…)Guzmán el Bueno andábase las uñas hurgando con su cuchillo cuando se vinieron a la muralla amenazando con matar a su hijo, cuando se acercó a ver que acaecía, tropezó y el cuchillo cayó muralla abajo (…)” Extracto de una crónica del sitio de Tarifa que me acabo de inventar.